Como seres que habitamos en este sistema solar, consideremos reintegrarnos al mismo, a los ciclos naturales, a los fenómenos del macrocosmos que inevitablemente se reflejan en nuestro microcosmos… para estar en sintonía y en paz con el planeta y con nosotros mismos.
En los últimos años, la indiferencia hacia estos eventos cósmicos ha ido in crescendo. La ignorancia, la soberbia humana en la vida urbana, nos han hecho olvidar nuestras raíces, lo realmente importante… la fuente del equilibrio.
Primavera: del latín prima o primus: Primer, y Ver: verano o verde. El renacimiento hacia la fuente de vida en el Cosmos: el Sol. El cambio de estación y de piel, la renovación…
Como iniciadora de nuevos ciclos, la primavera está asociada también a la diosa Afrodita, la deidad del amor.
En Grecia, las diosas Démeter y Perséfone representaban los poderes de la naturaleza, su transformación y la ciclicidad. El primer día de la primavera era el día en que Perséfone, prisionera bajo tierra durante seis meses, volvía al regazo de Deméter, su madre.
En las culturas indígenas de América, la llegada del nuevo ciclo climático que hoy conocemos como primavera era celebrado durante días. El reverdecer de la tierra señalaba la llegada de las cosechas y con ellas el sustento de toda la sociedad.
Este despertar a un nuevo mundo era celebrado también por los fenicios, quienes le rendían homenaje a Astarté, mientras que en la India la hacedora del milagro del florecimiento era la diosa Kali.
En México, los Equinoccios están asociados al retorno de la Serpiente Emplumada a la tierra: el recordatorio de que somos parte también de las energías cósmicas.
Este año 2012 es especial, no tendremos la súper luna del 2011, sin embargo, tiene características propias: inicia en este lado del mundo el Lunes 19 (día de la Luna), a las 23:14 hrs., el dato importante es que el último equinoccio de Primavera que se tiene registrado en México en 19 de marzo, ocurrió en 1896. La Primavera dará inicio unas horas antes de la Luna Nueva que marca nuevos comienzos y por supuesto, el año 2012 ha creado grandes expectativas, los cambios intensos, la transformación de conciencias.
A continuación, comparto contigo la emoción del inicio de la Primavera, desde un lugar de paz, verdor y armonía:
Te doy la bienvenida: Quetzalcóatl-Kukulcán-Serpiente Emplumada-Dragón Ancestral, que desciendes nuevamente a esta dimensión… entrando con tu sabiduría, con tus plumas de quetzal, por el centro de mi cabeza, sincronizando mis dos polos, insertándote en mi columna vertebral… posándote en el nido de la Serpiente, en tu hogar.
Sintiendo la fuerza de las entrañas de la Madre Tierra, desplazándose por las raíces, ascendiendo por las plantas de mis pies, absorbiendo la energía de cada ser en el planeta, nutriéndome… y te besa a ti hermosa serpiente, fusionándose en un abrazo de luz y amor.
Mis ancestros, mis bisabuelos, mis abuelos, mis padres, la humanidad entera está en mí, aquí y ahora, dándome su cariño, fuerza y consejos para un renacimiento.
Los sonidos del huehuetl y el teponaxtle, las ocarinas silbando, el toque de caracol, los cantos guturales acompañan mis pasos rítmicos en una muestra de alegría por recibirte. Un profuso humo de copal nubla mi vista, purificando mi mente, cuerpo y espíritu para poder escuchar los mensajes de los antiguos en un momento sin tiempo.
Soy de esta tierra: de un pueblo guerrero, de un pueblo unido al Cosmos, donde no hay lugar para los egos… solo se ama cada latido y cada respiración, se ama la vida.
Cientos de colibríes, águilas y mariposas salen a través de mi piel para volar en todas direcciones para llevar mensajes de amor y alegría.
Y aves multicolor llegan conmigo, volando a mi alrededor en espiral. Sus aleteos forman una brisa sutil que me deja conocer su mundo, mi mundo, las dimensiones entrelazadas en un mismo lugar.
Una cascada de agua, reboza dentro de mí, purificando cada célula, nutriendo cada órgano, bañándome en luz.
El Universo entero me regala flores hermosas y de aromas exquisitos. Recibo una suave lluvia de pétalos aromáticos y se abre ante mí un sendero florido.
Somos Uno: el tigre, la Luna, el ahuehuete, el águila, la pequeña flor, el Sol, el manantial, la serpiente, el espíritu de los antepasados que nos cuidan, tú, yo, México, y esta bendita casa Azul-Café… están en mí y estoy en ellos.
Bienvenida a tu casa, magnífica Serpiente Emplumada.
Ometéotl.
*** Alda ***
